Escucha al León Interior

En este artículo, comparto un viaje personal hacia el entendimiento de mi diálogo interno, revelando cómo este puede ser tanto un obstáculo como un impulso hacia el crecimiento personal. Te invito a descubrir conmigo cómo convertir la autocrítica en una voz de empoderamiento y cambio, abriendo el camino hacia la autoaceptación y una vida más plena.

Nela Materán

4/4/2024

Esa voz en tu interior que te habla constantemente, al principio no somos conscientes de ella; simplemente nos dejamos llevar y dominar por esos pensamientos que no paran y que, en muchos casos, se convierten en nuestro peor enemigo. El problema surge precisamente cuando no nos damos cuenta de su presencia y dejamos que sea el piloto de nuestras vidas.

No vengo a decirte que silencies esa voz ni que domines al león; vengo a decirte todo lo contrario: escucha los rugidos del león sin enjuiciarlo o castigarlo, porque es ahí donde encontraremos información directamente de la fuente, de la causa de todos o casi todos nuestros problemas.

Esto me pasó y, por supuesto, aún me pasa. Al principio no era consciente de esa voz; después, empecé a escucharla y traté de silenciarla o reemplazarla por pensamientos positivos autoinfligidos. Pero me di cuenta de que, con esto último, solo estaba dejando el polvo bajo la alfombra y estaba reprimiendo al león. Reprimir al león es solo una bomba de tiempo, enjaular a la fiera que, después, rompe sus jaulas y ruge más fuerte que antes.

Te invito a que permitas los rugidos y los escuches, como si escucharas hablar a un amigo o amiga muy querido. Creo que este es un buen ejercicio para empezar a cultivar nuestro amor propio, porque ya basta de maltratarnos y autoagredirnos. Cuando empecé a escuchar al león en mi interior, o a la loca de la casa, descubrí que era mi mayor obstáculo y mi peor coach. Estoy segura de que, si sigues aquí leyendo este artículo, es porque a ti también te pasa. La verdad es que a casi todos nos pasa, pero no todos hablan de ello.

¿Cómo detenerlo? En este punto de mi vida, creo que nunca se detendrá completamente; el león seguirá siendo león. Lo que cambia es nuestro nivel de consciencia y la forma en que mimamos, cuidamos, escuchamos, entendemos y tratamos al león, desde nuestro amor y respeto, aunque no le dejamos que tome el mando. Esto se vuelve mucho más fácil porque terminarás logrando separarte del león, entendiendo que no eres tú, aunque es parte de ti.

Si lo analizamos desde otra perspectiva, no es que el león esté en nuestra contra; realmente nos intenta comunicar, de manera brusca y tosca, situaciones en nuestro interior: miedos, culpas, arrepentimientos, etc. Cuando los identificamos, es en estos puntos donde debemos poner nuestra atención para sanar y liberarnos. Honestamente, se que si trabajamos en despertar nuestra consciencia, lograremos abrazar a la bestia para que nos acompañe en nuestro camino, con una voz de fondo más agradable.

Me gustaría saber si te aportó mi artículo

¿Te gustaría que sea tu Mentora?